jueves, abril 04, 2019

POR QUÉ ME FUI


Bueno, probablemente se habían dado cuenta de que hacía mil años no publicaba nada en el blog. En este post les voy a contar por qué. No es un testamento de 50,000 renglones, así que ¡pasá a leer!



La verdad es que dejé el blog porque no tenía más ganas de seguir usándolo. Simple y conciso. La segunda mitad del 2018 y principios del 2019 no fue una buena época en mi vida en todo sentido. Cosas que pasaron en mi familia, como el hecho de que perdí a mi abuela y la persona que más necesitaba no quiso estar para mí, cosas de mi vida sentimental, gente de mierda y demás. Desde aproximadamente septiembre hasta diciembre, todos los posts que publiqué en el blog fueron "forzados". Con esto no quiero decir que no me haya esforzado para hacerlos o que no me haya gustado el resultado final. Hay muchos de esos posts que me encantan, por más de que los haya hecho sin ganas. Pero la verdad es que en diciembre exploté. Al principio pensé que era porque estaba ocupada con la facultad y, sumado con las demás cosas, no tenía mucha voluntad para ponerme a hacer cosas del blog. Pero terminé de cursar en la facultad y aún así, las ganas no me vinieron.

Intenté crear algo nuevo, como la fallida (Si, fallida. Hace bien al alma admitir los errores) sección de noticias sobre la cultura pop. Si bien me encantó la idea porque siempre fui medio cholula, simplemente no funcionó. Traté de pensar nuevas ideas, pero tenía tantas cosas en la cabeza que no se me caía nada nuevo. Así, los primeros días de enero publiqué el último post. No porque no tuviera visitas (De hecho, en estos 3 meses sin publicar, el blog siguió teniendo visitas e incluso pasé de 80,000 visitas en total desde que lo creé, a tener actualmente casi 100,000. Tres meses sin publicar y gané 20,000 visitas). No era un tema de números ni nada parecido, eso jamás me importó porque HEY SOL! lo hacía por hobby, no para ganar plata. Simplemente necesitaba tomarme un descanso porque me estaba estresando. Sentía la presión de tener que publicar ALGO interesante todas las semanas, sumado a que tenía que hacer ilustraciones y sumados todos los mambos que tenía en la cabeza en ese momento.

Así que de un día para otro, decidí que me estaba enfermando mentalmente y no publiqué más nada. Al instante me sentí aliviada. Ya no sentía la presión de tener que hacer algo que no estaba disfrutando. Si me siguen en Instagram, también habrán visto que pasé un poco más de un mes sin publicar fotos y luego expliqué por qué. Un motivo bastante parecido a este. Me estaban enfermando las redes sociales, tener que ganar seguidores para "estar a la altura" de las otras influencers/bloggers/etc, tener que tener cierta cantidad de likes en las fotos, tener que subir ilustraciones todos los días, etcétera. Me di cuenta de que me estaba haciendo muy mal y decidí ponerle un freno. Volví un mes y pico después, muchísimo más relajada. Ahora ya no me preocupa ganar seguidores (De hecho, perdí casi 900 seguidores, si no me equivoco, pero no me importa en absoluto), ya no me preocupa subir ilustraciones todos los días, ya no me interesa subir stories mostrando lo que hago. Sólo subo una o dos ilustraciones por semana, porque me di cuenta de que es mejor la calidad antes que la cantidad

Y quizás se estén preguntando cómo estoy ahora y qué pienso hacer. Sinceramente, desde que aflojé con todo el tema de las redes sociales (Ojo, las sigo usando, pero más que nada a nivel personal y no por temas de negocios o trabajo) y el blog, estoy MUCHO mejor. Necesitaba alejarme de todo eso y dio resultado. Empecé a cursar en la facultad de nuevo y estoy mucho más relajada, sabiendo que tengo tiempo para hacer los trabajos prácticos sin la presión de que también tengo que hacer un post en el blog e ilustraciones. Hay gente que disfruta de hacer todo junto, pero yo no. Me hizo mal.

También me ayudó mucho la meditación. Sí, empecé a meditar y a cambiar mi cabeza. Quizás a algunxs les cause gracia o no le encuentren sentido, pero se los recomiendo muchísimo. Yo también pensaba que era una boludez, pero estaba equivocada. No sólo te ayuda a relajarte, sino que cambiás la forma de ver las cosas y a vos mismx. Yo, por ejemplo, me siento mucho más confiada y bien con mi cuerpo. En serio, si estás pasando por un momento de mierda en tu vida, te recomiendo que empieces a meditar. Buscá en YouTube o Spotify alguna meditación guiada (No sé si hay en español, yo las escucho en inglés), prendé un sahumerio y relajate.

En cuanto al blog, todavía no lo voy a volver a usar. Quiero usarlo cuando en serio me vengan la inspiración o las ganas. Por el momento, estoy tranquila sabiendo que está en línea y que la gente puede seguir entrando a consultarlo en cualquier momento. Fueron dos años que le puse todo mi empeño y siento que hay bocha de cosas para leer y entretenerte. HEY SOL! siempre va a tener un lugar muy especial en mi corazón, aunque pase meses sin usarlo.

Espero que entiendan, no es nada muy fuera de lo común. A todo el mundo le pasa que en algún momento colapsa y necesita un cambio. Mi cambio fue dejar de escribir en el blog, empezar a subir menos ilustraciones en Instagram, y empezar a meditar. Sí, dejé cosas. Pero fue para bien. Puse por arriba mi salud mental. También cambié un poco mi imagen, como se habrán dado cuenta si me siguen en mi Instagram personal. Bajé 5 kilos en un poco más de un mes, me teñí toda de rubia y me corté el pelo, me tatué, entre otras cosas. A veces viene bien un cambio de imagen aunque sea algo leve. Me siento más feliz. No tengo nada nuevo en cuanto a lo material, incluso vendí ropa. Pero estoy bien en el alma. Les quería hacer saber todo esto por si eran fieles lectores del blog y les llamaba la atención que no publicara nada. En algún momento voy a volver, cuando esté lista. Gracias por entender y por estar del otro lado de la pantalla leyendo esto. Les comparto una frase:

"Cambia el concepto de ti mismo, y automáticamente cambiarás el mundo en el que vives" - Neville Goddard

¡Besos!

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